El matador de toros hidrocálido Gerardo Adame está convencido ser un privilegiado de Dios y de que su conexión con la Plaza México ha sido como un bálsamo que le inyecta nuevos bríos aún en ciertas etapas difíciles que ha tenido a lo largo de su carrera.
Desde que se doctoró como matador de toros el 14 de mayo del 2011 en Aguascalientes, este mes de abril Adame ligará por primera vez cuatro festejos en un mismo mes, lo cual lo tiene muy ilusionado. El domingo 3 hará el paseíllo en Dzitbalche, Campeche; el 17 en Jerez, Zacatecas; el 21 en Aguascalientes y el 23 en Mérida, Yucatán. Solamente en mayo del 2015, Gerardo había tenido una seguidilla de tres festejos, los domingos 10, 17 y 24 de dicho año.
En sus 11 años que cumplirá en mayo próximo como matador, Adame tiene una importante suma de 106 corridas de toros, con el corte de 86 orejas y cuatro rabos, así como un indulto.
"Todas las corridas son importantes, pero sabemos que siempre hay una tarde clave en nuestras carreras y creo que la de Yucatán es una tarde clave. La de Aguascalientes también ya que se reactiva la Feria y me gusta mucho el cartel en mi tierra porque somos tres toreros mexicanos que hemos interesado, Calita, José María Hermosillo y un servidor. Ahí se va a ver un poco nuestra capacidad como mexicanos y de ganarnos los puestos en las otras corridas”.
Pero la fecha de Mérida, le provoca un sabor muy especial, puesto que alternará con el peruano Andrés Roca Rey y de nueva cuenta con su primo segundo, Luis David.
"Es la primera vez que toreo con Andrés y la tercera con Luis David. ¡Es un cartelazo! Son dos toreros que asimilan el toreo y lo hacen de manera muy diferente, pero le van al toro como si estuvieran en un patio entrenado y para mí es una oportunidad bastante buena para levantar la mano con más fuerza, tener un triunfo importante y reafirmar de lo que soy capaz. Y que también vean las figuras que aquí hay toreros puestos", afirmó.
En ese cartel juvenil para el que faltará plaza, Gerardo será director de lidia.
"¡Como pasan los años!, prácticamente joven de edad, pero taurinamente ya tengo mis años y ya me toca lidiar con la más fea de abrir plaza. A su vez estoy contento, es un reto abrir plaza. La gente está fría, se está acomodando y es complicado. Ya me ha pasado aquí en Aguascalientes que abres plaza y a la mejor una faena que era de dos orejas, cortas una. Pero ahí es donde tienes qué sacar la raza en verdad como primer espada y armar un jaleo desde el primer toro y que los pongas en apuros a los demás", aseveró.
Comentó también lo importante que es estar bien en la Feria de Aguascalientes, pues la nueva camada de matadores viene empujando muy fuerte.
"Hay muchos toreros en Aguascalientes y nuevos, entonces ahí es donde tiene uno que apretar el paso. Están Luis David y Leo Valadez y viene Miguel Aguilar, Héctor Gutiérrez y Diego San Román, que no es de Aguascalientes, pero viene apretando el paso. Es una camada bastante fuerte y es el momento de apretar el acelerador y montarte en ese carro también", indicó.
Acerca del momento actual en su carrera, ligado a sus tardes puntuales en la México que le han dado nueva vida, señaló:
"Estoy muy contento, gracias a Dios. Hacía mucho tiempo que no tenía cuatro corridas en un mes y ahora es cuando uno entiende que todo es a su tiempo. Fueron unos años difíciles, personalmente, emocionalmente, pero ahora regresamos con lo de México. Está también la claridad que México te da o te quita. En mi caso me ha estado dando gracias a Dios y también los triunfos que hemos estado puntuando en todas las corridas nos han abierto las puertas".
Dijo que quizá sí, la Plaza México sea como un talismán en su vida.
"La verdad siempre me ha recibido muy bien. Apretándome como toda afición y claro, como torero que soy, pero también creo que han valorado mi esfuerzo, mi carrera, mi trayectoria. Yo tengo muy claro que a la mejor no ha sido una trayectoria de postín, pero he luchado, me ha costado llanto, ganas de ya no torear, me ha costado sangre, de estar en los hospitales, pero eso mismo me hace que me contagie más y más de esta hermosa profesión. La México me ha dado ese respiro en el momento exacto y gracias por supuesto a la afición de todas las ciudades porque donde he ido me han recibido muy bien y creo que he dado la cara y les he dado gusto a toda la gente. Y por eso aquí sigo, en pie de lucha", expresó.
Sobre esos momentos de querer tirar la toalla, como en el boxeo, Gerardo indica que su familia es quien lo ha sacado adelante.
"Los amigos, luego son pocos. Gracias a Dios he conservado a mis amistades de anterior tiempo. Desde que tomé la alternativa siempre ha sido un grupo de amigos que no fallan, algunos son matadores retirados, pero sobre todo mi familia. Claro, otros amigos se desaparecen porque dejas de estar en ritmo, de estar preparado, de estar toreando, de estar en el tema y, te desplazan o simplemente se hacen nuevas amistades, pero creo que eso a final de cuentas es una consecuencia".
Desde hace tiempo, para llevar lo indispensable a su casa, sobre todo durante la pandemia, Gerardo encontró un trabajo alterno en una conocida empresa de Aguascalientes, que le ha abierto la posibilidad de conocer nuevas experiencias.
"La verdad que me he rodeado de gente muy buena fuera del toro. En mi actual empresa, donde trabajo, me he rodeado de gente y eso también es bueno: conocer otra gente, otro ambiente, hasta darte un poquito de topes en la pared porque también descubres que hay otro mundo afuera del toro. A final de cuentas, terminas relacionándolo bastante con el toreo porque sabes, o yo lo tengo muy claro, que es lo que amo y a lo que me he dedicado toda mi vida, que me puedo dedicar a otra cosa, pero los toros nunca los vas a dejar, pero valoras más las cosas".
Y de entre los amigos del toro mencionó a quienes ahora son sus apoderados, la empresa Toros Yucatán, que le ha tendido la mano.
"Tengo un par de años con ellos y las cosas han fluido poco a poco. Es un poco complicado porque están en una ciudad muy retirada del centro del taurineo de México, a pesar de eso la relación ha sido buena, estoy muy agradecido con ellos porque se han jugado la camisa en su momento por mí, han visto por mí, es algo que se ha ido dando poco a poco y nos hemos acoplado bastante bien”, apuntó.
Para rematar la amena charla después de un día de ajetreo en la oficina y de hacer ejercicio para mantenerse en forma, Gerardo revela la excelente relación que lleva con sus primos, y sobre todo con Luis David, con quien compartirá cartel en Mérida.
"La primera vez que toreamos juntos fue en Yucatán precisamente, ahí corté una oreja y él se fue en blanco y la segunda fue en Monterrey donde indulté y ahora compartiré cartel de vuelta en Yucatán. La relación es bastante buena, me llevo muy bien con los tres con David, con Alejandro y con José. Con David un poco más, somos más apegados y curiosamente es con el que más he toreado.
"Hablamos anteriormente de que existía la posibilidad que volviéramos a torear juntos y nos emocionamos bastante. Estamos entrenando casi a diario, echamos toda la mañana juntos, nos vamos a correr, a entrenar, a comer, llevamos una relación bastante buena, de familia. Lo demás en la plaza cada uno sale a su tema, pero creo que de verdad nos arreamos desde el campo, al correr nos arreamos uno al otro, pero en su sana competencia de familia", finalizó.