El acto comenzó con las emotivas palabras de bienvenida por parte de Alberto Máximo Pérez,  Presidente del Ateneo de Sevilla, quien hizo una mención especial del entusiasta torero mexicano Rodrigo Galguera, que gracias a su gestión y su trabajo, fue posible traer esta obra a Sevilla después de muchos meses de espera.

Siguió el turno de Isabel Garfias, que agradeció a todas las personas que hicieron posible el poder presentar su expresión artística con esta exposición, siendo un homenaje a su padre, quien murió el pasado 30 de abril. En su discurso comentó: "Defender este arte, que nos une como países, y hacer un llamado de la defensa de la tauromaquia con arte y cultura".

También estuvo presente Eduardo González Biedma, Cónsul honorario de México en Andalucía, quien dirigió unas emotivas palabras a la artista y elogió su trabajo que tiene un sello tan mexicano y que posee un estilo muy definido que la coloca en un nivel interesante dentro de la representación de artistas plásticos de la actualidad.

Debido a la cercanía de Isabel con el campo bravo Mexicano así como con las maravillosas manos de la gente que le da vida a la misma, ha logrado dar un marcado acento campirano y muy mexicano a su obra. Destacando lo mismo en  detalles de filigrana que en un variado y elegante colorido de la grandiosa influencia de la pintura oaxaqueña.

La obra consta de más de 25 cuadros de diferentes medidas y algunas esculturas en las que predomina el tema taurino, las cuales estarán expuestas hasta el 24 de septiembre en el Ateneo de Sevilla.