Luego de haber sido diagnosticado con Covid-19 el mes pasado, lo peor ya pasó para el destacado subalterno Gustavo Campos, quien afirmó que está en el último periodo de convalecencia de esta cruel enfermedad. 

"Gracias a Dios ya estamos levantándonos. Fueron días muy complicados, sobre todo porque es una enfermedad que tiene los síntomas fuertes pero muy distintos a cualquier otro", afirmó el torero de plata de 37 años y quien radica en Aguascalientes. 

Dijo que al estar en Torreón donde estuvo trabajando con un tío, con visitas frecuentes a una central de abastos, sintió los primeros síntomas y decidió regresar para atenderse en Aguascalientes con los máximos cuidados posibles en su traslado. 

Para su mala fortuna el protocolo de salud en Aguascalientes señala que para hacerse la prueba de Covid-19 el paciente debe presentar fiebre y como él no la tenía, no le hacían la prueba hasta que consiguió hacérsela después de varios días. 

"Mucha gente dice que es "como una gripe" pero no es así, se tienen síntomas muy contundentes. Yo presenté dolor de cabeza, ardor de ojos, dolor de cuerpo, sobre todo dolor de articulaciones que a mí me dieron muy fuertes, diarrea, dolor de pecho y dolor de pulmones que todavía no se me pasa muy bien, pero son los estragos que quedan de la enfermedad". 

En esos días de aislamiento trató de pasarlo bien, alimentado e hidratado como se recomienda, y sobre todo poner el ánimo lo mejor posible "porque cuando uno está decaído se bajan las defensas". 

"De acuerdo al protocolo después de 14 días el virus ya está totalmente muerto, no hay probabilidad de que vuelva a tenerlo. Me dieron siete días más para no tener una recaída y siete días más en las que puedo tener salidas esporádicas al súper porque no puedo exponerme tanto. Ya no me hicieron la segunda prueba porque me dicen que ya pasó". 

Consideró que fue muy afortunado en no tener que ser hospitalizado, y no obstante que tuvo días muy difíciles, su cuerpo resistió la enfermedad en su confinamiento. 

Campos agradeció a todas las personas que estuvieron al pendiente de su salud y que incluso le hicieron llegar alguna ayuda. 

"De verdad quisiera recomendarle a la gente que tomen en serio esta enfermedad, si a mí que no me pegó tan duro, que no fue una situación tan complicada me sentí muy mal y sentí de verdad que sí iba a caer en el hospital, imagínense todas las personas que están en el hospital, que están intubadas, con respirador o que tienen los dolores muy fuertes, no me lo quiero imaginar. 

A todos ellos quiero hacerles un llamado a que lo tomen en cuenta y se cuiden en la medida de la posible. Esto es muy complicado, como está la economía tenemos que salir a trabajar, pero hay que cuidarse porque de verdad esta enfermedad sí existe y es muy dura de llevar", señaló Campos.