El domingo 22 de mayo de 1960, hace 60 años, se llevó a cabo un inusual acontecimiento taurino en la Plaza de Toros Mérida, ya que se concedieron dos alternativas en una sola tarde, las de Rafael Báez y Manolo Gómez, respectivamente.

En el cartel se anunciaba la presentación del matador colombiano Pepe Cáceres, el gauanajuatense Héctor Obregón, así como de los novilleros Rafael Báez (venezolano) y Manolo Gómez, quienes lidiarían ocho toros de Palomeque, propiedad de los hermanos Fernando y José Antonio Palomeque.

Rafael Báez nació el 24 de octubre de 1926 en Caracas, Venezuela. Recibió la alternativa de manos de su gran amigo Pepe Cáceres, según se aprecia en la fotografía de la ceremonia. El toro de esta primera ceremonia se llamó "Consentido".

Por su parte, Manolo Gómez, hijo del matador yucateco Manuel Gómez Blanco, apodado "Plis", vio la primera luz en la Ciudad de México. Se doctoró en el mismo festejo siendo su padrino el propio Cáceres, que le cedió la muerte del toro "Satanás".

Después de una discreta trayectoria como matador, Báez se convirtió en el único apoderado de Eloy Cavazos, con una relación profesional de casi medio siglo, lo que es un caso insólito en la historia del toreo, sinónimo de entrega mutua y confianza mutua.