Después de las publicaciones y los ataques hechos de manera reciente por el periodista Vicente Zabala de la Serna, en el diario El Mundo, de Madrid, la Asociación Nacional de Organizadores de Espectáculos Taurinos (ANOET), en España, envió un comunicado donde explica su postura ante los acontecimientos.

A continuación, presentamos de manera íntegra el comunicado que explica lo siguiente:

"ANOET quiere denunciar públicamente la información publicada el pasado 24 de marzo en el diario El Mundo, bajo el título "Las ayudas que el mundo del toro solicita a Cultura por el coronavirus: de la lógica a lo sideral en una carta a Uribes", firmada por Vicente Zabala de La Serna. Esta se basa en un documento que nunca fue enviado al ministro de Cultura, tal como afirma Vicente Zabala.

Alentado por esta publicación, el mismo 24 de marzo, El Mundo publica otro artículo de opinión, "Que Uribes le pague el caché a Roca Rey", firmado en esta ocasión por Juan Diego Madueño. Nuevamente, aprovechando el altavoz privilegiado que ofrece un medio de comunicación, se agrede a la Tauromaquia tergiversando las verdaderas intenciones que las distintas asociaciones del sector taurino han transmitido al ministerio. 

En su texto, Madueño acusa incluso a todo el sector de ridiculizarse y mendigar, e insinúa barbaridades como que ciertos toreros o apoderados quieren cobrar sus cachés a pesar de las suspensiones de los festejos.

De esta forma, por iniciativa de ANOET y en base a estas publicaciones, el 29 de marzo se envió una carta a  Francisco Rosell, director de El Mundo, sin ánimo de levantar ninguna polémica por la emergencia sanitaria tan delicada en la que estamos inmersos debido a la pandemia, en la que todos los firmantes de la misiva enviada al ministro de Cultura,  José Manuel Rodríguez Uribes (la Fundación Toro de Lidia, la Asociación Nacional de Organizadores de Espectáculos Taurinos, la Unión de Criadores de Toros de Lidia, la Unión Nacional de Picadores y Banderilleros Españoles y la Unión de Toreros), exponemos nuestro malestar por las opiniones vertidas en su diario el día 24 de marzo, advirtiendo de que el documento que sustenta las mismas es falso y distinto del enviado al señor Rodríguez Uribes.

El único objeto del escrito dirigido a Cultura por las entidades firmantes representantes de la Tauromaquia, entre las que se encontraba ANOET, fue considerar a la Tauromaquia una más de las industrias culturales competencia de dicho ministerio, con el objeto de que esté presente en las medidas que el Gobierno pueda adoptar en esta materia y no consentir que quedara marginada. Los puntos de la carta dirigida al ministro buscan paliar la situación de crisis actual y reactivar la economía del sector pensando en todos los agentes implicados, especialmente en aquellos que, hasta la fecha, no tienen cabida en las medidas excepcionales adoptadas por el Ejecutivo.

Asimismo, también se manifiesta que no es nuestra intención ejercitar acción de rectificación ni judicial alguna, por la situación que vive nuestro país, en el que la prioridad fundamental pasa por aunar esfuerzos para mantener la necesaria unidad frente a la terrible crisis sanitaria que pone a prueba en este momento a todos los españoles de bien. Pero eso sí, se informa en todo momento de que las afirmaciones que publica el diario que dirige son inaceptables, están fuera de lugar y suponen un serio perjuicio para la Tauromaquia.

El 9 de abril, Vicente Zabala de la Serna vuelve a publicar un artículo de opinión en El Mundo con el titular "El Caballo de Troya de Simón que desacredita a la Fundación y la clave de Valencia". En él muestra su malestar por la carta dirigida por todo el sector taurino a su director. Como no podía ser de otra forma, el artículo está repleto de ofensas, agresiones y faltas de respeto a los firmantes de la misiva, pero es especialmente cruento y malicioso hacia la persona de Simón Casas, poniendo en tela de juicio no solo su profesionalidad de 40 años como empresario, sino también su solvencia personal y económica.

Todas y cada una de las decisiones y acciones de ANOET, representada por su Junta Directiva, son adoptadas de manera solidaria y firme por todos sus miembros. Todos se hacen responsables de ellas, incluso para tomar acciones legales si es necesario. No se puede consentir la mera insinuación de una manipulación interesada de las decisiones de ANOET y mucho menos en una coyuntura como la actual de crisis, donde el único objetivo es y será la búsqueda del bien de la Tauromaquia, de los aficionados y del sector.

Nos hemos visto en la obligación moral de dar contestación pública a los artículos referidos en esta carta, y nos gustaría que se diera este tema por zanjado, ya que hay muchos profesionales y aficionados taurinos sufriendo por esta grave crisis sanitaria y económica, y es hora de estar unidos y trabajar juntos por el bien de la tauromaquia y no entrar en polémicas que perjudican la imagen del sector".