La artista y diseñadora de profesión Isabel Garfias Montero, orgullosa de sus raíces netamente mexicanas y llenas de colorido, presentará su exposición pictórica taurina en el Ateneo de Sevilla, previo a la Feria de Abril, durante los próximos días martes 21 al viernes 24 de abril.
La oriunda de San Luis Potosí que pertenece a la importante dinastía ganadera de Garfias, creció en su rancho entre vacas y toros de lidia, en tanto que plasma en su obra tanto la esencia como la pasión, en suma a la alegría por la pintura y la fiesta de los toros.
Desde su perspectiva, dicho gusto, no fue algo impuesto, sino una situación que se dio en el día a día y con todo lo que representa el toro bravo y los animales, y que hasta la fecha conserva. En la siguiente entrevista Garfias Montero explica a detalle sus sensaciones de cara a la presentación en Sevilla.
¿Cómo se siente Isabel ante su próximo proyecto?
Me siento nerviosa y a la vez muy contenta, pero tranquila porque es algo pensado. Es un tema cien por ciento taurino, donde será mi presentación en tierras hispanas, en una época de preferia. En un lugar muy taurino que me llena de orgullo, en un lugar soñado como Sevilla, donde espero le guste a la afición taurina y luego de ahí la exposición va a un lugar muy conocido como es la Taberna del Alabardero, ahí mismo en Sevilla.
¿Qué significa para ti mostrar el toreo a través de tu arte?
Realmente yo pinto cosas estáticas, no en movimiento, algún día lo haré. Yo más bien pinto cosas aisladas; por ejemplo dentro de lo que es la plaza, pinto el toro y los toreros estáticos, sin que estén pegando un pase. Yo creo que el toreo es tan efímero y tan bello y los fotógrafos lo captan. Yo no lo he intentado, hasta el momento no me ha nacido.
¿Qué intentas reflejar en tus obras?
Mis obras están influenciadas por los elementos mexicanos con mucho colorido. Yo intento reflejar la alegría porque mucha gente ya en el arte se va por lo que vende, es decir mucho el drama, mucha la sexualidad, mucho lo que causa dolor, yo creo que porque impacta. Yo no quiero reflejar eso, porque la vida es bastante cansada para mostrar esa parte. Yo creo que es mejor para mí pintar cosas alegres, algo que llame la atención, que digan está padrísimo.
El colorido en mis obras se debe a que pasé mucho tiempo en Oaxaca, tengo muchos amigos oaxaqueños y me enseñaron muchas técnicas de cosas nuevas y era muy feliz allá. Mis piezas son muy estructuradas, no puedo tener una cosa vacía y esa es la base de la carrera.
Mi trabajo se podría decir es naif, casi plano, no por ello autodidacta. Tuve una gran influencia de mis maestros como Ixrael Montes, Andrea Chinoco, Marcela Matos y Rolando Rojo.
Con respecto a la técnica que prefiere Garfias comentó: "El oleó me gusta porque es la técnica que muy maleable, que puedes corregir a diferencia de la acuarela, es una técnica que considero va a durar para siempre".
Respecto al tema taurino, su primera exposición fue en 1994 en San Miguel de Allende, en una Convención de la Asociación de Creadores de Toros de Lidia y cuenta con una formación académica entre México e Italia, además ha de que su obra tiene gran proyección en países como Japón, Francia, Italia, Argentina y Estados Unidos.
El año anterior, Garfias fue invitada a diseñar el ruedo de la plaza "Oriente" de San Miguel de Allende, en la corrida de "La Insurgencia", donde su trabajo se aclamó por la crítica y debido al éxito se le invitó a decorar la plaza de Acho, siendo así la primera artista en decorar el legendario coso limeño a iniciativa de la empresa Casa Toreros.