"¿Quién es ese que anda ahí…?" Es Arturo Castro Ortega, fundador del grupo de los Forcados de Mazatlán y prestigiado artista plástico a quien la presidencia municipal de Autlán de la Grana, Jalisco, le encargó realizar 11 personajes de Cri-Cri "El Grillito Cantor", como tema principal para su tradicional Carnaval 2020, que inició ayer.

Arturo, el forcado, quien se encuentra recuperando de la fractura que sufrió el 12 de marzo del año pasado en "La Petatera", cuando un toro de 600 kilos de la ganadería de Fernando de la Mora le partió la tibia y el peroné de la pierna izquierda y el hueso maléolo externo del tobillo, dio tiempo a Castro Ortega, el artista, a seguir realizando su obra artística, ya conocida en el mundo.

"Me contrataron para hacer 11 personajes de Cri-Cri y aparte hice un toro. A los personajes que se dejaron les incluí algún motivo taurino como fueron el caso de "El Negrito" y "El Ratón Vaquero", a los que les coloqué una hebilla de toro bravo.

"El toro grandote que traje y que presté para la muestra es mío, le puse "El hijo desobediente" y lo hice en honor al toro que me fracturó hace un año y este también salió ca… porque al colocarlo quebró una rama de un árbol y se le doblaron los cuernos, pero ya quedó arreglado", dijo el queretano.

Comentó que el presidente municipal le dio libertad de trabajar en la obra, siguiendo el tema que se eligió para este año, que fue el de los personajes de los cuentos y canciones infantiles, del cantante y compositor Francisco Gabilondo Soler "Cri-Cri".

"Me invitaron a colaborar con los artesanos locales, yo hice todo lo que es la estructura, el moldeo y algunas piezas las forraron y otras las dejaron al natural, como yo las hago y van a terminar colocadas en un parque temático aquí en Autlán. Es lo primero que hago que no es taurino netamente, pero lo hice taurino en algunos detalles.

"A la gente le gustó porque cambió el estilo de lo que se venía haciendo. La importancia de hacerlo en un material más resistente para que sirva posteriormente y para dejarlo. Estamos usando para los personajes placa de acero, varilla, alambrón, varilla de construcción, varilla lisa y la pieza del toro que traigo en exhibición es de 3.60 metros de largo, el toro está derrotando y se sostiene solito en sus patas", señaló.

Descendiente de una familia de destacados artistas plásticos, donde sus dos abuelos fueron uno pintor y escultor y el otro pintor, un tío pintor y dos primos escultores, lo mismo que uno de sus hermanos, Arturo se inició en estas lides antes que ser forcado, hace más de 34 años.

"Siempre pinté, pero nunca expuse. Mis cuadros los guardé muchos años hasta que en 2004 me invitó el embajador de México en Portugal a exponer mis obras en Lisboa y a los años volví a exponer en un castillo en Portugal.

"También expuse en la Biblioteca de Alcochete, en las fiestas del Barrete Verde que son tradicionales y después en Belha Brava, donde año con años hacen una exposición de esculturas taurinas", comentó.

En México ha expuesto en la Asociación de Matadores, así como en la plaza "Nuevo Progreso" de Guadalajara; en el Palacio de Justicia de Jalisco; en Val Quirico en Tlaxcala; en "El Salitre", en Querétaro, durante la Convención Nacional de Aficionados Prácticos, así como también en Mazatlán, donde cerró una calle y posteriormente montó una galería durante seis meses en el puerto.

"He mandado obra a Nueva York, a California, a Texas, en fin, a diferentes lugares y estamos preparando otra exposición para el año que entra en Portugal", agregó.

La temática de su obra es el toro, que mezcla con la figura humana, mientras que el tamaño de su obra es principalmente óleo sobre tela en formato grande.

"Básicamente me gusta pintar el toro, la raíz, la figura humana, la mujer como ciclo de vida, como la madre naturaleza me gusta pintar al toro enraizado, toros custodiando a la madre naturaleza en forma de árbol, de cuerpos de mujer, bailadoras, etcétera, pero lo que más me inspira pintar es el toro con elementos que convivimos en forma diaria, la vida, la muerte, el sol, la luna, el día, la noche.

"No pinto quizá con mucho colorido, no me gusta usar muchos colores, mi pintura te lleva a interpretarla, como no es un paisaje no copio, no me gusta copiar. Pinto también muchas especies que están con el toro bravo, el toro es lo que me motiva por la imagen del animal, lo que representa para mí, lo que me ha dado en la vida: conocer y viajar a lugares a los que no hubiera llegado si no ha sido por el otro bravo. La pieza fundamental de mi obra es y será siempre el toro bravo, que es el que me inspira", concluyó.