La obra teatral "La Cornada", es un drama de Alfonso Sastre que se estrenó en el teatro Lara de Madrid el 14 de enero de 1960, su tema es inminentemente taurino y hace hincapié en aspectos muy profundos de la vida de un torero, tales como el valor o el miedo, las relaciones amorosas o el pagar por torear al inicio de la carrera, entre otros tópicos.

En el prólogo que se desarrolla en la enfermería de la plaza de toros, el médico titular expone antecedentes de lo que vendrá después, el personaje Marcos, el apoderado, ha contratado una corrida para el torero José Alba, que deberá matar seis toros en solitario ante un día nublado y con viento, lo que habrá de suponer que se trata de una de las últimas corridas de la temporada.

En el primer acto se verá a los protagonistas en la habitación de un hotel, por la mañana el día de la corrida, donde el torero desnuda su alma y sentimientos ante su apoderado, mientras éste trata de convencerle de que es un gran torero y que debe jugarse la vida para seguir reinando en los primeros lugares del escalafón.

Tiempo en que aparece el personaje de Gabriela, esposa del torero que vive separada de él desde hace algún tiempo. El encuentro entre Marcos y Gabriela es bastante duro, cruzándose mutuos reproches sobre el intento de monopolizar a José para su propio su propio beneficio, en tanto que más adelante el propio Marcos confesará:

"El éxito, esa es la única verdad. Si no se consigue nada tiene sentido. ¡Para tener razón hay que tener éxito! Yo sólo creo en la verdad que da dinero, esa es la verdad que yo busco, la que encuentro donde me lo propongo. Lo demás es mentira, resentimiento, cosas sin importancia, eso que se dice entre los grupos de pordioseros de cafés baratos".

Termina el acto con una entrevista entre el torero y el sobresaliente que actuará por la tarde y el encuentro entre José Alba y Gabriela ante la ausencia de Marcos.

En el segundo acto se produce un enfrentamiento entre Marcos y José, éste le pide que no lo abandone y aquel le intenta obligar a mantener todos sus compromisos. Tras hablar con Gabriela el torero pretende reducir sus actuaciones para dedicarle más tiempo a ella, razón que no le sienta nada bien al apoderado, la conversación es tensa y Alba pretende no hacer el paseíllo.

Ante la insistencia el torero se autolesiona para así tener una excusa y no torear, aunque luego se verá que Marcos le lleva con engaños a la plaza, donde se pretende aplazar la corrida a causa del mal tiempo, cosa que finalmente no sucede.

El epílogo presenta a Marcos, abatido en una taberna propiedad del sobresaliente que actuó en la trágica corrida y que pareció apuntar buenas maneras. Hay una propuesta para apoderarlo pero le exige que venda la taberna y lo dedique todo a los toros a cambio de ser figura del toreo.

El personaje Rafael a pesar de que conoce las dificultades para triunfar sin ayuda, no acepta la oferta porque dice que aquella taberna forma parte de su vida, es herencia de su padre y en ella nació y creció. Molesto por la negativa Marcos se va y a su salida se encuentra con Platero, su anterior poderdante, que ha caído en la miseria y es un mendigo borracho que vive de la caridad.

Una obra en suma, que une la alegría del éxito y la gloria, con la rápida desaparición de esta, cuando no se obedece a los dictados de quienes se mueven alrededor de un torero y ni público, ni amigos, ni prensa, serán capaces de apoyar a alguien de quien han vivido durante algún tiempo.

Alfonso Sastre presenta "La Cornada" con el interés, el argumento e incluso la jerga propia de los toros y hace desfilar a todos los elementos que pueden tener influencia en la vida de un torero.

Sastre, Alfonso. "La Cornada", drama en un prólogo, dos actos y un epílogo. Editorial Afil. Colección Teatro. Madrid. 1960.