Roberto Román evoluciona de manera favorable tras la cornada que recibió en la Plaza México el domingo 7 de octubre, al realizar un quite con el capote, tratándose del primer percance en su carrera, que lo ha hecho reflexionar acerca de distintas cuestiones.

"Este percance me ha ayudado a madurar un poco más, ya que me di cuenta que las cornadas duelen porque te dejan sin torear, pero te hace madurar ciertas cosas, como en mi toreo, que sé que tengo que mejorar mucho. También aprendí que tienes que conocer más el oficio, y yo sigo pensando que el valor no me lo han quitado", comentó Roberto.

Asimismo, el joven hidrocálido recordó que la tarde en que fue herido, su único pensamiento era volver a torear; de igual manera tras la intervención quirúrgica a la que fue sometido. Su estado de salud progresa de manera positiva, gracias a las adecuadas medidas de higiene y reposo casi absoluto que ha tenido tras este bautismo de sangre.

"Mi intención es reaparecer el próximo domingo en la novillada de Calaveras, así que estos días serán importantes en mi recuperación para no perderme este festejo, que será uno de los últimos del año ya que de aquí a diciembre ya no habrá novilladas", puntualizó.

En este festejo, programado en la plaza "San Marcos", está acartelado con José María Hermosillo y Héctor Gutiérrez, para lidiar novillos de Lebrija.

Cabe recordar que Roberto Román inició su carrera novilleril el presente año 2018, en el que ha toreado un total de 13 festejos, con el corte de diez orejas.