Hace justamente 25 años, el 16 de marzo de 1990, el maestro Enrique Ponce se convertía en matador de toros luego de recibir los trastos en la plaza de Valencia, dentro de la Feria de Fallas, "bodas de plata" que enmarcan una efeméride importante dentro de la Fiesta.

Enrique, que era ya un novillero importante y toreó más de 100 festejos menores, con triunfos estacados en muchas plazas, recibió la alternativa de manos de José Miguel Arroyo "Joselito", que le cedió los trastos en presencia de Miguel Báez "Litri" y ante ejemplares de Puerta Hermanos.

El histórico nombre del toro de la ceremonia fue "Talentoso", herrado a fuego con el número 21 y 505 kilos de peso, curiosamente lidiado como sobrero. Hace 25 años nacía un torero que llegaría a convertirse no solamente en una figura, sino en un diestro de época.

Su debut sin caballos había sido el 10 de agosto de 1986, cuando contaba todavía con 14 años, pues nació en Chiva, Valencia, el 8 de diciembre de 1971. Se presentó con los del castoreño el 9 de marzo de 1988, en Castellón, y el 1 de octubre del mismo año debutó en Las Ventas de Madrid.

Tras la alternativa, confirmó en Las Ventas el 30 de septiembre de aquel año 1990, llevando como padrino al genial gitano Rafael de Paula, en presencia de Luis Francisco Esplá, con toros de Viuda de Diego Garrido. En este coso de la calle de Alcalá, Enrique Ponce ha conquistado tres salidas por la Puerta Grande, mismas que tuvieron lugar en los años 1992, 1997 y 2002.

Más allá de este galardón, ha cuajado faenas de trascendencia en Las Ventas y una de las más recordadas es la lograda ante "Lironcito", de Valdefresno, en 1996, una combinación de poder y arte, un trasteo modélico; no le tumbó las orejas debido a que el toro se amorcilló tras la estocada y tuvo incluso que hacer uso del descabello, para entonces llevarse solamente un trofeo.

El 13 de diciembre de 1992, Ponce pisó por vez primera la Plaza México y, por ende, fue la tarde de su confirmación de alternativa en el monumental escenario capitalino. Llevó como padrino a Guillermo Capetillo, mientras que fungió como testigo David Silveti. El toro fue "Nevado", de la ganadería de La Venta del Refugio.

En la Plaza México siempre ha sido de los toreros favoritos y ha cuajado grandes faenas en este escenario capitalino. Sin embargo, debido a las fallas con el acero, perdió muchas veces los máximos trofeos, aunque ello no fue óbice para que cosechara el cariño del respetable.
 
Su primer rabo lo cortó hasta el año 2005, en la inauguración de la Temporada Grande, a un toro de Fernando de la Mora, mientras que el segundo fue en febrero de 2009, ante un ejemplar de San José. Otra de sus más grandes faenas fue este año 2015, a un toro de Teófilo Gómez al que desorejó.

Durante varias temporadas, dentro de la década de los noventa, Enrique Ponce superó las 100 corridas por año. En 2010, esta figura de época alcanzó la rotundo cifra de las dos mil corridas toreadas, alcanzando un lugar muy especial en la historia, pues Ponce siempre ha sido un torero de cantidad pero, sobre todo, de calidad.

Actualmente, y en lo que quizá es ya la recta final de su carrera, Enrique sigue mostrando madurez y sapiencia en los ruedos. Toro completo y poseedor de una técnica envidiable, así como la solera del arte excelso, celebró este aniversario toreando el pasado sábado en Castellón, donde triunfó, y hoy lo hará precisamente en Valencia.