El rejoneador colombiano Andrés Rozo, que desde el año pasado había estado vivendo en México y pudo torear algunos festejos, tomó la alternativa el pasado domingo en su tierra, cocretamente en la ciudad de Bucaramanga, de manos del maestro Pablo Hermoso de Mendoza.
Esta fecha tan especial para él la saldó con un triunfo importante, pues cortó las orejas y el rabo, lo que le valió para salir a hombros junto al rejoneador navarro, que también se llevó los máximos trofeos. El cartel lo completó el también caballista José Miguel González.
Andrés volverá a México, pues tiene tres fechas contratadas; dos en localidades del estado de Hidalgo y una en la laza "Conchita Cintrón" del Centro Caballar Los Azulejos, en Atizapán, Estado de México.