Contento por su debut en la Plaza México, el hidrocálido Ricardo Frausto sabe que esto es apenas un paso en su carrera y tiene en mente poder cortar las orejas cuando sume su repetición en la presente Temporada Chica, algo que sería de gran trascendencia para él.

"Ayer pude disfrutar bastante, aunque la tarde fue difícil debido al clima y a las condiciones del piso. Estoy contento pero no satisfecho y sé que es importante cortar las orejas, algo que buscaré si es que puedo volver a torear esta misma campaña en México. Quiero mandar la enhorabuena a César Ibelles y a Antonio Lomelín, que ayer también estuvieron muy bien", comentó el novillero.

Pisar la Plaza México fue cumplir un sueño y más lo fue el haber dejado ese buen sabor de boca. Naturalmente que el coso capitalino le impuso, pero esta situación fue motivante.

"La Plaza México impone, e impone mucho, no solamente por el tamaño que tiene y ser la más grande del mundo, sino por lo que representa, por el valor para los toreros y el peso que tiene una actuación ahí. Por supuesto que tuve nervios el día de ayer, pero también mucha motivación y las cosas salieron bien", externó.

En medio de la lluvia, Ricardo estructuró su faena ante el sexto de la tarde, un ejemplar que tuvo un buen lado izquierdo y con el que pudo demostrar sus buenas cualidades.

"Este novillo tenía buena condición y me percaté que su mejor pitón era el izquierdo. Me olvidé de la lluvia y del piso, así que comencé a torear con el alma, con el corazón, y la respuesta de la gente fue muy bonita; la verdad que no esperaba que el público se me entregara de esa manera", dijo.

La petición de oreja fue intensa y, aunque no fue otorgada, Frausto dio la vuelta al ruedo con mucha fuerza entre los vítores del público, que le reconoció el esfuerzo desplegado y lo momentos de buen toreo que regaló.

"Yo soy el menos indicado para decir si merecía o no la oreja, creo que el público tendrá la mejor opinión, así como el juez de plaza; no me fue concedida la oreja, pero no pasa nada y ya vendrán nuevas oportunidades. Lo que sí es verdad es que disfruté muchísimo esa vuelta al ruedo y la entrega de la gente", comentó.

Además del buen momento taurino que está viviendo, el hidrocálido tiene ilusiones y está motivado por su reciente entrada a Tauromagia Mexicana. Sin embargo, reconoce y agradece a quien hasta hace algunos días fuera su apoderado, José Luis Ramírez "El Padrino".

"Entrar a Tauromagia es una bendición de Dios y que crean en mí; agradezco mucho al licenciado Julio Esponda y al matador Mario Zulaica. Me ofrecen cosas buenas y la exigencia será muy fuerte, así como mi preparación, pues el proyecto es buenísimo. También le doy las gracias a El Padrino, que ha sido como mi ángel de la guarda y siempre me apoyó desde mis inicios; es un gran ser humano y la Fiesta necesita más gente como él", sentenció el novillero, que esta tarde actuará en Caxuxi, Hidalgo.