El picador de toros Víctor Ortega fue operado con éxito de la hernia inguinal que tenía, y se recupera satisfactoriamente en el Hospital La Concordia de Orizaba, donde fue intervenido ayer por la mañana por el doctor Ricardo Guzmán Aguilera.

La operación se complicó ya que a lo largo de la misma se encontró un abseso en un testículo, y en vez durar una hora y media, como esta previsto, tuvo una duración de cinco horas. Sin embargo, el varilarguero de dinastía se encuentra bien, según expresó en las primeras horas de la tarde:

"Afortunadamente todo salió bien y, aunque la operación se complicó, los doctores realizaron bien su trabajo. Estoy un poco dolorido, pues el abseso que tenía estaba grande, pero al final todo se resolvió y espero recuperarme pronto".

Con 19 años de brillante trayectoria, Víctor espera jubilarse en breve y continuar vinculado a los toros en distintas facetas.