Jesús Adolfo Ruiz, padre del torero, añadió que la lesión la pudo haber provocado la picadura de un insecto, algún cuerpo extraño, así como la intensa preparación diaria. Por lo anterior, toreó infiltrado en la reciente Feria de San Cristóbal, donde salió a hombros en las dos tardes que estuvo anunciado.

Esta lesión provocó su baja en los carteles de Lenguazaque y Pairán, teniendo que hacer una pausa necesaria a recomendación de su cuerpo médico. De acuerdo a lo que se adelantó, la idea es reaparecer en Autlán de la Grana y, sobre todo, estar el cien por ciento, en la Plaza México, el próximo 2 de marzo, donde va a confirmar su alternativa con toros de Rancho Seco.