El tlaxcalteca rayó a plenitud en el segundo de su lote, aunque la afición tapatía no valoró en su justa dimensión todo lo que hizo. "Jalisciense" fue un toro que no apretó la romana, pues detuvo la aguja en 485 kilos, pero al que por su arboladura astiblanca no le faltaba presencia. En cambio, fue un galimatías al que Sergio le plantó cara con mucha determinación y realizó una faena de entendimiento y valor que mucho honra a un torero.
El de Xajay culminaba su recorrido en la barriga del toreo; pero Sergio Flores encontró el difícil tiempo, sitio y distancia, para dominar y torear con temple y gusto al emotivo astado. Lástima que no haya doblado el toro a pesar de una entera desprendida y tres golpes con la espada corta.
Excuso decir que bordó al primero de su lote. Un toro ligero de carnes, pero hecho y derecho que fue pronto, obediente, humillado y de amplio recorrido. Tampoco es sencillo estar a la altura de ejemplares como "Expresión", que así se llamaba, del ganadero Javier Sordo.
El hispano Antonio Ferrera, como es su costumbre, echó mano de toda su responsabilidad para complacer a la afición de la Nuevo Progreso. Así que nos regaló con una interesante faena al primero de su lote, un bonito cárdeno salpicado de los cuartos traseros al que le cuajó series templadas por ambos lados, desde el comienzo del tercio de muerte. El extremeño se entregó y la afición le respondió al ejecutar detalles de buen gusto: trincherazos, de la firma, desdenes y cambios de muleta. Todo de manera oportuna y de buen gusto. Mató de una estocada entera y desprendida, para escuchar un aviso. Aplausos para el toro en el arrastre.
El cuarto de la tarde, segundo de su lote fue el lunar del encierro. Desarrolló genio y hasta sentido. Ferrera tuvo a bien y lo despachó pronto.
El toreo michoacano Isaac Fonseca, quien hoy debutó en Guadalajara, no se entendió con la afición. Dio muestras de su valor espartano en el primero de su lote, al recibirlo de hinojos con la muleta en una embestida espectacular de tercio a tercio, aunque también le faltó emotividad al toro. El segundo de su lote fue pronto y obediente, pero Fonseca no estaba en su día.
Para mañana la empresa anuncia un encierro de Pozohondo, para Juan Pablo Sánchez, Diego Silveti y la presentación en esta plaza del sevillano Juan Ortega, en lo que será la segunda corrida al hilo de este largo fin de semana de toros en la Perla de Occidente.