David Hernández y Palemón García Venegas llevaron a cabo primera faena de tienta del hierro que fundaron en el rancho Las Golondrinas, situado en la población de Saucillo de Maldonado, municipio de Zapotlanejo, ubicada en la región denominada como los Altos de Jalisco. 

El tentadero corrió a cargo del picador Martín Carrillo y los matadores que intervinieron fueron el tapatío Óscar Rodríguez "El Sevillano", el hidrocálido Héctor Gutiérrez, así como el jefe de los servicios médicos de la plaza "Nuevo Progreso", el doctor Francisco Preciado, todos auxiliados por el novillero Efrén Rosales.

La faena se desarrolló en un ambiente mexicano por los cuatro costados: desde los orígenes de la sangre fundacional (Cerro Viejo y Teófilo Gómez, más una punta de don Aurelio Franco) hasta la arquitectura del rancho y las instalaciones camperas, construidas exclusivamente con materiales de la región.

Los trabajos dieron comienzo con el corte de simbólico listón del tentadero bautizado "Ingeniero Rubén Pérez", en honor a ese inolvidable aficionado práctico, empresario, apoderado y juez de plaza, y que estuvo a cargo del prestigiado escultor tapatío Jorge de La Peña.

A lo largo de esta jornada campera, se disfrutó de una tarde por demás taurina, a la que también asistió el matador Ernesto Castellón, su hermano Erick, y algunos amigos y familiares de los ganaderos, quienes se han decantado por la sangre brava, cien por cien mexicana.