En un ambiente de sabor añejo tras la presencia de un torero cuyo apellido ha marcado los anales de la historia de la torería mexicana, la peña taurina "Tinto y Oro", celebró su nueva tertulia taurina en donde estuvo como invitado el matador de toros retirado Manolo Arruza, quien hizo énfasis en la importancia de seguir impulsando a toreros de nuevo cuño a lo largo y ancho de todo el territorio mexicano.

La reunión, en ocasión de sus 50 años de alternativa, fue convocada por el presidente de la peña, el ingeniero Francisco Campos González y atrajo la atención de un sinnúmero de aficionados y toreros en ciernes, incluidos los alumnos de las escuelas taurina de Calkiní y Yucatán, quienes entregaron un reconocimiento al torero invitado, a manera de tributo por su larga trayectoria en diversos ruedos del mundo.

 

La tertulia, moderada por el destacado escritor y cronista taurino Antonio Rivera, transcurrió con un sinnúmero de anécdotas de la familia Arruza, incluidos diversos pasajes del legendario "Ciclón Mexicano", Carlos Arruza, por lo que conceptos como la disciplina, entrega, esfuerzo y vocación, tomaron relevancia como reglas para destacar entre los jóvenes torerillos presentes.

Manolo Arruza, de fructífera carrera como matador de toros a lo largo de 50 años de alternativa en los que sumó mil tres corridas de toros, recordó la tarde de su doctorado el 22 de octubre de 1973 en la plaza Nuevo Progreso de Guadalajara, de manos de Eloy Cavazos y como testigo Curro Leal con el toro "Zacatecano" de la dehesa de Jesús Cabrera.

Los presentes recordaron que Arruza confirmó en la Plaza México, el 22 de diciembre de 1974, nuevamente de manos del regiomontano Eloy Cavazos y ante la presencia del salmantino Pedro Gutiérrez Moya "Niño de la Capea", con el toro "Barrilito" de Javier Garfias.

Entre sus otros logros, resaltaron la tarde del 18 de febrero de 1975 cuando se presentó en ruedos de Venezuela, en el marco de la Feria del Sol, en  Mérida, lidiando toros de Rancho Seco, alternando con Sebastián Palomo Linares, Paco Alcalde y Rafael Ponzo.

En plaza Monumental de Las Ventas de Madrid confirmó el 20 de mayo de 1975 de manos de Sebastián Palomo Linares con el toro "Loco" de José Benítez Cubero y como testigo, Francisco Rivera "Paquirri".

Arruza se dijo emocionado por la recepción y el evento organizado por la Peña Taurina "Tinto y Oro", por lo que resaltó el impulso de la fiesta en esta zona del país, esfuerzo que el también continúa en Aguascalientes, su actual lugar de residencia, participando con las actividades de la Academia Taurina Municipal "Alfonso Ramírez "Calesero", donde impulsa a las nuevas generaciones.