Un momento muy dramático se vivió ayer en la plaza "Nuevo Progreso" de Guadalajara cuando el cuarto toro de la tarde, de la ganadería de Fernando de la Mora, empitonó de fea manera a Octavio García "El Payo" y lo trajo varios segundos colgado de un pitón.

Aunque en un principio parecía que la cornada iba a ser de consideración, por fortuna sólo fue leve pero en una zona muy dolorosa, ya que le provocó una herida en el pene. Sin embargo, el torero queretano tuvo los arrestos de permanecer en el ruedo hasta dar muerte al toro, y después pasó por su propio pie a la enfermería.

Tras una primera valoración fue estabilizado y enviado el Hospital Country 2000 para se atendido por el equipo encabezado por el doctor Francisco Preciado, jefe de los servicios médicos del coso tapatío, quien al filo de las 22:00 horas emitió el siguiente parte:

"Se realizó aseo quirúrgico y debridación de una laceración de aproximadamente seis centímetros de extensión, en la cara dorsal del pene. Presenta también hematoma del meato uretral. Adicional a ello, también presenta esquimosis y escoriaciones de diversos tamaños en la región inguinal izquierda, así como en el muslo izquierdo, cara interna.

Fue valorado por el servicio de urología, descartando lesiones de los cuerpos cavernosos y uretra, decidiéndose la colocación de sonda de Foley por laceración del meato uretral.

De no presentarse complicaciones, es posible que el paciente salda del hospital en un término de 48 horas".

Los doctores que atendieron a Octavio fueron Jorge Aguilar Gil Lamadrid (urólogo); José Carlos Gomar González (cirugía general y coloproctológica); Fernando Cervantes Salcedo (anestesiólogo), así como el propio doctor Preciado.