José Alberto Ortega cortó la única oreja concedida hoy en la Plaza México, donde se llevó a cabo la tercera y última novillada de la Feria de Aniversario, en la que se lidió un encierro de la ganadería de
Villar del Águila, que fue noble y manejable en su conjunto.
El novillero tlaxcalteca repitió el triunfo conseguido en la primera parte de la temporada, y así que con esta oreja ya suma dos en su paso por el coso de Insurgentes, donde se mostró enterado y con la ambición para continuar escalando peldaños en la profesión.
En el tercer novillo de la tarde, Ortega estuvo variado y volvió a torear a una mano con el capote, incluido un péndulo, suerte que ya había ejecutado en su anterior comparecencia pero sin la misma limpieza que ahora. Y más tarde aprovechó las buenas embestidas del de Villar del Águila, para torear con temple y desparpajo. Mató de una estocada entera y así fue como se le concedió una merecida oreja.
El sexto ya no tuvo la misma nobleza de su ejemplar anterior, pues fue exigente, y José Alberto Ortega tuvo que echar mano de valentía y actitud para solventar la papeleta. Se salió de cacho a la hora de ejecutar la suerte suprema y señaló un pinchazo que hizo doblar al novillo, hecho le granjeó escuchar fuertes palmas.
Eduardo Neyra, que ya tiene más experiencia, y ha toreado en este coso varias veces, estuvo variado al torear de capote al primero de su lote, al que le hizo una faena entonada, que quizá no conectó tanto con el público porque el novillo acudía con la cara alta. Mató de un estocada eficaz y fue ovacionado.
En el cuarto, el espigado torero de Durango lució otra vez con el capote, que maneja con facilidad, ante un novillo de clara y noble embestida al que toreó bien en tandas por ambos pitones, pero quizá sin redondear del todo. Se puso pesado con la espada y escuchó un aviso.
El novillero yucateco Jusef Hernández Medina (así se anunciaba antes), que ya alguna vez se había tirado como espontáneo en este plaza, recibió la oportunidad de torear en la Feria de Aniversario y, de entrada, ejecutó la suerte del Tancredo que le resultó magnífica, pues aunque el novillo salió y le pasó a centímetros del cuerpo, mientras él permanecía inmóvil sobre un taburete, no se movió y eso agradó mucho al escaso público que había en los tendidos.
Para continuar con esa misma tónica de espectacularidad para agradar a la gente, antes de cubrir el tercio de banderillas ejecutó el salto con la garrocha, suerte que hace tiempo no se veía en la Plaza México y que, en su día, por allá de 1991, realizó Alfredo Ríos "El Conde" el día en que debutó aquí como novillero.
Con la muleta se mostró animoso y decidido, pero carente del oficio necesario y el rodaje para redondear su faena y sufrió un par de volteretas sin consecuencias, a lo largo de un trasteo que no trascendió.
En el segundo novillo de su lote tampoco estuvo al altura de las circunstancias, no obstante que volvió a manifestar sus ganas de agradar, ante un novillo que le pedía mando y toreo de mano baja. Lo más destacado lo hizo con la espada, ya que mató de una buena estocada y parte del público le pidió una oreja que no fue concedida por haber faltado mayor fondo a su labor.
Así concluyó esta tercera y última novillada de la Feria de Aniversario en la que Arturo Gilio fue uno de los máximos triunfadores, al haber cortado dos orejas a un magnífico novillo de Núñez del Olmo el viernes 4 de febrero.
Ahora solamente falta la corrida del próximo domingo en la que el triunfador Diego Sánchez entra a la combinación en sustitución de José Mauricio. El hidrocálido alternará con Arturo Macías y Fermín Rivera, para lidiar toros de Barralva. Además, la empresa ha incluido al rejoneador portugués Paco Velásquez, que debuta en este escenario, acompañado de los Forcados Amadores de México.
Ficha Ciudad de México.- Plaza México. Tercera novillada de la Feria de Aniversario. Unas dos mil personas en tarde nublada y con intermitentes ráfagas de viento. Novillos de
Villar del Águila, bien presentados, nobles y manejables en general. Pesos: 450, 449, 459, 461, 458 y 456 kilos.
Eduardo Neyra (negro y plata):
Ovación y silencio tras aviso.
Jusef (obispo y azabache):
Vuelta tras aviso y división.
José Alberto Ortega (verde olivo y oro): Oreja y ovación. Incidencias:
Jusef interpretó el tancredo en el 2o., así como el salto con garrocha. Destacó en banderillas
Diego Martínez, que saludó en el 2o. El monosabio
Juan Sitges realizó un oportuno quite al banderillero
Adolfo Sánchez, al lanzar su kepis.
Jusef brindó el 5o. al futbolista y director técnico
Francisco Palencia. Presidió el festejo el matador retirado
Gilberto Riuz Torres, que no había estado en el palco desde hace varios años.