Se trata de una oferta económica que supera en un 300 por ciento a la cantidad mínima exigida por el gobierno valenciano (que era de 150 mil euros, unos 3 millones 500 mil pesos), y que ha dejado de lado las demás propuestas hechas por distintas empresas taurinas.

Y siendo este coso de primera categoría un plato muy apetecible para cualquiera de ellas, no ha podido ser ante el derroche económico hecho por la primera, pues se asegura que todas cumplieron al completo con los distintos puntos exigidos por el pliego, aunque la de Garrido y Casas terminó por ser la más jugosa para la Diputación Provincial de Valencia.

A este concurso también se presentaron Funtausa (de los hermanos Matilla), con una oferta de 353 mil euros (8 millones 320 mil pesos); Tauroemoción, de Alberto García, que ofreció 321 mil euros (7 millones 600 mil pesos), y BMF Martínez Flamarique-FIT, de Alberto Bailleres y los hermanos Chopera (6 millones 300 mil pesos).

Una vez revisada toda la documentación necesaria por parte del gobierno, y garantizado el pago de la cantidad ofrecida, se estima que será en septiembre cuando la empresa ganadora firme el contrato de explotación de la plaza. Entretanto, la afición quedará a la espera de saber cuándo reabrirá sus puertas este emblemático coso, tras casi dos años de permanecer cerrado.