Fallece la ganadera Mónica Ibargüengoytia
Una de las ocho hijas de don Manuel, fundador de San Antonio de Triana
La ganadera Mónica Ibargüengoytia Cortazar, del hierro de San Antonio de Triana, falleció esta madrugada en Houston, a la edad de 57 años, como consecuencia de un cáncer que afrontó con mucha entereza, con el apoyo de su familia, de la que forman parte su esposo, el matador Guillermo Suárez del Real y su hijo Andrés, también torero.
Mónica nació el 8 de septiembre de 1961 en la Ciudad de México, y era la menor de las ocho hijas de don Manuel Ibargüengoytia Llaguno, que era primo hermano de los hermanos Antonio y Julián Llaguno González, de San Mateo y Torrecilla. Ella también siguió los pasos de su padre con mucha afición desde que era pequeña, cuando esta destacada ganadería zacatecana ya se había fundado en 1950. Y hasta llegó a vestirse de corto para torear algunos festivales.
Realizó estudios en la Escuela de Periodismo "Carlos Septién García" de la Ciudad de México. Andando el tiempo casó con Guillermo, que tomó la alternativa en 1985 y es el primer matador con doctorado nacido en Zacatecas. Y años más tarde, el 25 de marzo de 2018, su hijo Andrés también siguió los pasos de su padre y se doctoró en la plaza de Jerez. De hecho, el próximo domingo 25 de agosto está anunciado en una corrida de oportunidad en la Monumental de Zacatecas.
Además de los mencionados Guillermo y Andrés, le sobreviven sus hijos Santiago, Diego y Sebastián. Será recordada por su carácter alegre y carismático, además de las sabiduría para mantener unidos a sus cuatro hijos. Desde aquí enviamos nuestras más sentidas condolencias a ellos. Descanse en paz.
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