El matador venezolano Luis Sánchez Olivares "Diamante Negro" falleció este 1 de enero en el Hospital Central de Maracay, a los 89 años de edad, quien fuera uno de los toreros más importantes en la historia de aquel país suramericano.

Luis Sánchez nació el 22 de febrero de 1927 en la población llamada Ocumare del Tuy, en Venezuela, y su presentación de luces tuvo lugar en el año de 1945. Su consolidación novilleril se dio cuando emprendió el viaje a España en 1948 y tuvo éxito en varias plazas de la geografía ibérica.

Toreó también en Las Ventas de Madrid y en la Real Maestranza de Sevilla. La alternativa la recibió en la plaza de la ciudad de Granada, donde como novillero tuvo un triunfo destacado. Este suceso tuvo verificativo la tarde del 29 de septiembre de 1948.

Aquel día, Diamante Negro llevó como Paquito Muñoz y como testigo a Manolo González, delante del toro llamado "Estornino", de la ganadería de Félix Moreno Ardanuy, procedencia Saltillo.

Una vez convertido en matador, regresó a su natal Venezuela y toreó con importantes figuras del toreo en las principales ferias. De vuelta a España, ratificó el doctorado en Las Ventas de Madrid en el marco de un cartel de postín, pues el maestro Antonio Bienvenida le cedió los trastos en presencia de Pepín Martín Vázquez.

El toro de la ceremonia llevó por nombre "Mellado" y perteneció a la ganadería de Manuel Arranz. La imagen que acompaña a esta nota, captada por el genial Paco Cano, es de aquel día de la confirmación.

Diversos matices y circunstancias fueron obstaculizando su carrera. Uno de éstos fue la puñalada que recibió por parte del monosabio López Rizo, hecho que lo tuvo tres semanas entre la vida y la muerte, logrando superar el complejo trance aunque perdiendo el ritmo de su carrera.

Otro de los momentos complicados que tuvo que superar Diamante Negro fue la cornada en el cuello sufrida el 10 de diciembre de 1957 en el Nuevo Circo de Caracas.

El maestro venezolano también tuvo la oportunidad der torear en México. En la Plaza México confirmó su doctorado la tarde del 2 de enero de 1949, de manos de Alfonso Ramírez "El Calesero" y el testimonio de Luis Procuna, ante el toro "Muñeco", de Pastejé, convirtiéndose en el primer espada venezolano en ratificar su alternativa en el coso de Insurgentes.

Después de algunas retiradas y retornos, Luis Sánchez dijo adiós a los ruedos de manera definitiva en 1972, la tarde del 21 de enero, tras torear en San Cristóbal Venezuela.

Descanse en paz Luis Sánchez Olivares "Diamante Negro".