Al Toro México | Versión Imprimible
Muere Juanita Aparicio en Querétaro
Por: Redacción | Foto: Archivo
Miércoles, 30 Sep 2020 | CDMX
Tenía 85 años y fue una de las primeras mujeres que actuó en La México
La torera Juanita Aparicio falleció el domingo 27 de septiembre en la ciudad de Querétaro, a la edad de 85 años, luego de una vida de entrega a la fiesta de los toros, misma que comenzó durante su juventud cuando incursionó e los ruedos con éxito a mediados de los años cuarenta, y siendo una de las primeras mujeres toreras de México.

Juanita nació en Monterrey el 27 de enero de 1935. Era hija del novillero y charro Paco Aparicio, que llegó a torear en España, de Eva Castro. Ese contacto con la Fiesta, los lienzos charros, los caballos y el ganado fue la que, años más tarde, detonó su afición taurina cuando ya vivía en la capital, adonde sus padres se habían trasladado siendo ella muy pequeña.

Cuando tenía 11 años se puso por primera vez delante de una becerra, y gracias a los consejos y enseñanzas de su padre, emprendió un difícil camino en una época en que el influjo de Conchita Cintrón había causado una profunda huella entre los aficionados.

Su debut tuvo lugar el 11 de marzo de 1951, en el Rancho del Charro de la Ciudad de México, que por entonces estaba ubicado en las calles de Schiller, en Polanco. Ahí tuvo ocasión de compartir escenario con el maestro Carlos Arruza durante un festival. Esa tarde cortó un rabo y fue tal la emoción que sintió, que ya no pudo dejar de lado esa pasión que sentía por la tauromaquia.

Aunque al comienzo de su carrera también alternaba la charrería con las actuaciones vestida de charro y toreando a pie, una grave fractura de columna vertebral le restó capacidad para montar a caballo durante un extenso período de tiempo. Sin embargo, una vez recuperada de dicho percance, continuó con su carera como novillera, en la que obtuvo muchos éxitos en plazas de provincia.

Con un total de 45 festejos en su haber, se presentó en la Plaza México el 13 de septiembre de 1953, tarde en al que actuó por delante en la lidia de dos becerros de Santa Marta, en un cartel compuesto por los novilleros Carlos Montes y Honorio Rivera. En esa Temporada Chica repitió el domingo 27 del mismo mes de septiembre. Lidió sendos becerros de Cerro Gordo, cortó una oreja, y actuó por delante de los novilleros Carlos Cruz Portugal, Rubén Salazar y Javier Maceira, que enfrentaron reses de La Laguna.

De las actuaciones que tuvo en el coso de Insurgentes se recuerda la del 26 de junio de 1955, en que estoqueó un becerro de La Laguna, por delante de los novilleros Rubén Aviña, Juan Guajardo y Pedro de la Serna.

Su buen quehacer taurino trascendió las fronteras del país, y también la contrataron para torear en varias plazas de Sudamerica. Destacó en una actuación en el Nuevo Circo de Caracas, donde alternó con la norteamericana torera Patricia McCormick.

Al cabo de algunas trabas para torear, por el hecho de ser mujer, tomó la decisión de retirarse, hecho que ocurrió en "El Toreo" de Cuatro Caminos. Al cabo de un par de años decidió reaparecer, cuando ya tenía 25 años, para retirarse definitivamente el 12 de noviembre de 1959 en la plaza de León.

Una vez retirada, se casó con José Manuel Álvarez, con el que procreó cuatro hijos: José Manuel, Juan Antonio, Francisco y Alejandra.

Su relevancia dentro del toreo femenino mexicano quedó patente al bautizar la plaza de toros de San José del Valle con su nombre, en recuerdo de la actuación que protagonizó en dicha localidad del estado de Nayarit.

Juanita Aparicio estaba emparentada con el matador Mariano Ramos, de quien era tía. El torero charro de La Viga, que compartió aficiones con ella, se sentía muy orgulloso del paso de su tía por los ruedos, ya que siempre hacía mención de ella, y también de su tío Paco, cuando se le preguntaba por sus antecedentes taurinos.

En los últimos años vivía en la colonia Tejeda de Querétaro, y había mostrado mucho interés en colaborar con el Centro Taurino Queretano, con el que ya estaba participando en la planificación de la recolecta de piezas para hacer un museo. Desde aquí enviamos nuestro pésame a sus familiares y amigos. Descanse en paz.