A unas cuantas semanas de celebrar su primer año como matador de toros, el tapatío Arturo de Alba vive un momento de regocijo por los compromisos que tiene en puerta en las próximas semanas y que espera le sirvan para dar un toque de atención a los empresarios del país.

El próximo martes 18 de febrero se presentará en "La Petatera", de Villa de Álvarez, Colima, en la segunda corrida de feria donde compartirá cartel con Pablo Hermoso de Mendoza y Antonio García "El Chihuahua" en la lidia de ejemplares de Marrón para rejones y 4 de Guanamé para los de a pie.

A la semana siguiente, el 25 reaparecerá en Jalostotitlán, donde compartirá cartel con el rejoneador Guillermo Hermoso de Mendoza y los matadores Antonio Ferrera y Leo Valadez, para lidiar ejemplares de San Pablo.

"Ya ni duermo, se me ha ido el sueño muy temprano, pero aquí estoy, entrenando muy fuerte, apretando, porque quiero estar listo para el primer compromiso que es en "La Petatera", mencionó.

El joven matador jalisciense de 25 años reconoce que el haber nacido en un estado tan taurino como el suyo, el compromiso de dar la cara por sus paisanos es muy fuerte en cada tarde donde se presenta.

"Gracias a Dios ha sido ya casi un año muy provechoso de mi carrera y desde que tomé la alternativa habré toreado alrededor de 10 corridas de toros con estas dos próximas que tengo en puerta, en las que llevo un balance de casi dos orejas por tarde.

"Creo que voy bien, me siento muy a gusto, muy contento, muy motivado por los resultados que he tenido hasta ahora, luego de mi corrida en Morelia, las tres que toreé aquí en Tlaquepaque donde fui triunfador, así como la tarde en “La Florecita” donde di la vuelta al ruedo y la más reciente, en El Grullo, donde también me fue bien", agregó.

De Alba, cuyo corte de toreo es clásico y sus espejos son Daniel Luque, Enrique Ponce, Finito de Córdoba y Alejandro Talavante, espera conseguir dos triunfos importantes y dar de qué hablar a los empresarios del país.

"Hay muchos focos de atención puestos en mí, muchas expectativas, pero si yo me pongo a pensar en eso me presiono al doble. Soy una persona muy perfeccionista y las expectativas que pueda haber y el primer compromiso que tengo es solamente conmigo, con mi persona, con mi sueño. Ser leal, más a mí disciplina y a mi vocación y ya después yo creo que con eso se va ganando el cariño de la gente y el respeto.

"Yo me veo y me sueño algún día en pisar como torero en una corrida en la plaza de mi tierra, Guadalajara y dar un golpe de atención, ese es un sueño que tengo. Los triunfos de Tlaquepaque me abrieron puertas y eso permitió que los empresarios de por aquí de la región se fijaran en mí para estos festejos inmediatos y espero seguir así, dando muestras de atención a todos", aseveró.

De Alba es apoderado por José Luis Villarreal y la empresa Taurotecnia, que opera su también coapoderado Oscar Rodríguez, el mismo que se encarga de su preparación previo a cada festejo.