Al Toro México | Versión Imprimible
Guillermo Hermoso destaca en Monterrey
Por: Martín Banda | Corresponsal
Domingo, 15 Abr 2018 | Monterrey, N.L.
El hijo de Pablo dio la única vuelta al ruedo de la tarde

El joven rejoneador navarro en fase de amador, Guillermo Hermoso de Mendoza, malogró con la hoja de peral dos buenas faenas en su presentación en la Monumental Monterrey y fue el único en dar la vuelta al ruedo, que tuvo, eso sí, un sabor a triunfo.

Memo sorprendió a los aficionados que hicieron una regular entrada en tarde muy calurosa y con viento y a punto estuvo de llevarse el triunfo, por encima de su padre Pablo Hermoso de Mendoza, que abrió plaza, y de los matadores de a pie Diego Silveti y Sergio Garza.

Los novillos de La Estancia para el juvenil torero de a caballo resultaron manejables y con clase, por lo que Guillermo lució sobre los lomos de los caballos, dejándose llegar cerca las embestidas de los astados que emocionaron al público que en todo momento estuvo apoyando al novillero navarro.

Los aplausos que escuchó tras pasaportar al tercero de la tarde, tuvieron mayor recompensa tras liquidar al séptimo, ya que fue premiado con la única vuelta al ruedo.

Por su parte, Pablo, quien lidió dos ejemplares de San Isidro, no tuvo enemigos a modo, pero como ya es costumbre derrochó voluntad y entrega. Esta es quizá la primera ocasión que El Señor de Navarra sale con las manos vacías del coso regiomontano.

Ahora no hubo oportunidad de redondear las faenas con las suertes que le han hecho un ídolo, como las banderillas cortas, la rosa, el teléfono, las piruetas en el ruedo, o la hermosina, ya que sus toros dejaron mucho qué desear.

Para los de a pie tampoco hubo suerte. Diego Silveti, con el primero de la lidia ordinaria corrido en segundo lugar, realizó un aseado trasteo por ambas manos, principalmente con la mano diestra, adornada con una serie de vistosas trincherillas y una de ajustadas manoletinas que fue de agrado de la afición, pero que malogró con la espada al dejar una ración de espada entera contraría antes de un descabello.

El segundo de su lote fue difícil y complicado y no le permitió mayor lucimiento. Mató de un metisaca y una estocada defectuosa, antes de retirarse en silencio.

El regiomontano Sergio Garza, quien apenas abrió su libro histórico de corridas como matador con alternativa, siendo esta su primera después del doctorado en una plaza de primera, batalló para hacer que el público entrara en su quehacer ante el cuarto del largo festejo que se alargó por tres horas.

Garza es un torero todo voluntad y entrega, aunque en ocasiones se sale del script y puede más su arrebato que su voluntad de hacer las cosas con clase.

Esta vez ni perfeccionó la clase, ni pudo dar un golpe de autoridad con base en su toreo con el que tiene acostumbrado al publico regio,;esto es, el de irse a los medios, cubrir el tercio de banderillas y buscar afanosamente las embestidas de los toros. El primero de su lote tuvo calidad, pero el regio no convenció al graderío y para colmo se puso pesado con el acero y escuchó un aviso.

Ante su segundo, la faena parecía que tendría altos vuelos, pero de pronto el astado cambio de lidia y se volvió áspero y peligroso, por lo que fue imposible sacarle partido.

Todo queda listo para el próximo domingo 22 en la que están anunciados Enrique Ponce, Octavio García "El Payo" y Leo Valadez, ante un encierro de Arroyo Zarco. Ojalá que entonces haya más suerte.

Ficha

Monterrey, N.L.- Plaza Monumental. Primera corrida de temporada. Media plaza (más de tres cuartos en sombra y un tercio en sol), en tarde calurosa. Ejemplares de diversos hierros: San Isidro (1o. y 5o., rejones), Jorge de Haro (2o., 4o. 6o. y 8o.) y La Estancia (3o. y 7o., rejones), regulares de presencia y poco juego en general, salvo el 7o. Pesos: 460, 525, 462, 508, 530, 494, 485 y 490 kilos. El rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza: Palmas y silencio. Diego Silveti (blanco y plata): Palmas y silencio. El rejoneador Guillermo Hermoso de Mendoza: Palmas y vuelta. Sergio Garza (blanco y oro). Palmas tras aviso y silencio tras dos avisos.