No cabe duda que a pesar de los momentos amargos y tristes que a muchas familias de México les ha tocado vivir con la pandemia del Covid-19, hay también aquellos pasajes de vida y enseñanza que van dejando una onda huella de sensibilidad y humildad, en los corazones de la gente que ha sido buena con sus semejantes. 

Uno de ellos es el matador de toros tlaxcalteca José Luis Angelino, quien además de sentirse realizado al dirigir una escuela taurina en su estado, ha podido convivir de cerca y vivir las necesidades con los habitantes de Tetla y Calpulac, dos municipios a los que le unen un gran cariño desde niño. 

"Yo nací en Apizaco pero estoy muy vinculado en Tetla. Todos mis hermanos estamos registrados ahí, además de que ahí tenemos muchísima familia y es el lugar donde también estudié un año de primaria. Sin embargo, ya tengo 15 años radicando en un municipio que se llama San Bartolo, que pertenece también a Tetla, que es un municipio muy importante. 

Mi padre nació ahí, en Tetla. Ahí vivió su juventud y ahí está sepultado, por eso le tengo un cariño muy especial a este municipio. Hace un año y medio comencé a trabajar con la Escuela Taurina de Tetla, por invitación del presidente municipal Eleazar Molina, quien tuvo la idea de hacer la escuela aprovechando que tiene una plaza muy hermosa". 

Comentó Angelino que la escuela se ubica a un costado de una Unidad Deportiva de Alto rendimiento y que en un año y medio de labores ya se cuenta con 20 alumnos que están empezando a dar de qué hablar. 

"Pero se vino la pandemia y hubo días que no se pudieron dar clases para evitar los contagios y fue entonces cuando de la presidencia me mandaron a hacer labores en la comunidad, porque antes que torero soy ser humano y me entusiasma poder ayudar.

"Comencé con algunas cuadrillas de empelados en apoyarlos a repartir despensas, por ejemplo. Hay también un programa municipal que se llama "Empleo temporal" que se está dando a la gente que trabaja toda la semana, a quienes se les da un recurso económico y al final mantienen el municipio limpio ya que ellos pintan las casas, barren las calles, hay un orden en todo y esto le da una imagen bonita a Tetla". 

Todos los días, desde las siete de la mañana, Angelino se traslada desde San Bartolo a otra comunidad llamada Capulac, en donde casualmente su papá estudió la primaria y ahora el tiempo lo hace regresar a esos lugares que le traen recuerdos familiares. 

"Créeme que lo hago con todo corazón servir a la gente y regresar a la gente lo que a mí me ha aportado, que son bastantes alegrías y que siempre han estado pendientes de mi carrera. El estar con la gente y empaparme de ellos me sensibiliza mucho. Sobre todo ver a la gente a esa hora empezando a hacer sus labores para ganarse el pan de cada día". 

Al borde de las lágrimas, el matador tlaxcalteca narra cómo la gente de pueblo, desde pequeñitos, se van acostumbrando a hacer algo por el bien de la comunidad, y eso es una actitud muy importante.

"Créeme que es bonito, porque uno muchas veces anda ahí quejándose de la vida, queriendo siempre más, pero cuando te toca vivir estos momentos te enriquece bastante, sobre todo que regresas al origen de tus raíces que es esa gente, la gente que trabaja y se gana la vida dignamente todos los días con mucho esfuerzo". 

En la entrevista, Angelino reconoció el apoyo de sus compañeros matadores José María Mendoza y Héctor Gabriel, quienes se acercaron recientemente a donar avíos, trastos de torear y calzonas a los chicos de la escuela taurina. 

"Son detalles que antes que toreros son seres humanos grandes y esos detalles hablan de lo que son como personas. Quiero agradecerles de corazón porque son cosas significantes en tus inicios de torero que tienen un precio muy especial, ellos se quitaron las cosas y se los dieron a los chicos de la escuela taurina y también porque los chicos se lo han ganado". 

También agradeció el apoyo que los ganaderos de Reyes Huerta, Marco Antonio González, de Piedras Negras y Sergio Hernández, de Rancho Seco, han tenido con ellos. 

"Nos han invitado a sus casas, por lo tanto, también deseo agradecerles porque siempre les dan buena cara a los chicos y son bien recibidos por ellos", finalizó.