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De Alba corta la única oreja en Guadalajara

Domingo, 26 Nov 2017    Guadalajara, Jal.    Felipe Aceves | Corresponsal           
Dentro de la novillada semifinal en la plaza "Nuevo Progreso"

Arturo de Alba fue el triunfador de la novillada semifinal celebrada hoy en la plaza "Nuevo Progreso" de Guadalajara, Jalisco, ya que cortó la única oreja de un festejo en el que también tomaron parte José María Pastor, Iván Hernández, Francisco Martínez, Rafael Soriano y De Santiago

Hoy estuvimos “los cabales” en la "Nuevo Progreso" de Guadalajara. Los que, llueva, truene, relampagueé, o así juegue al futbol quien sea, no dejamos de ir a la plaza.

Y los aficionados tienen diferente la vara de medir. Aquilatan cada detalle. Son pacientes, e incluso tolerantes con los novilleros y los juzgan de manera tal: como novilleros. Claro, a los punteros (Pastor y De Alba) les exigieron mayores argumentos. El palco no tanto. Más bien lo sentimos un tanto localistas con en el de la tierra. Tan es así, que a pesar de un pinchazo previo a una entera fulminante, usía le concedió un trofeo.

Esto no le resta méritos a la buena faena de Arturo De Alba; pero “al César lo que es del César”. “Tejón”, cuarto en el orden, le correspondió al tapatío, un novillo menor en presencia que el resto del encierro, pero el de mayores posibilidades para la lidia. Sin nada que consignar en su toreo de capa frente a un novillo abanto, ya con la muleta consiguió, primero, fijarlo con muletazos largos y tersos por bajo. Esto fue fundamental. Enseguida se dio a engarzar series destacadas por la mano derecha. Con la izquierda supo capitalizar el mayor recorrido, mientras el público le jaleaba la buena expresión que tiene para el toreo al natural por la mano zurda. Hubo una que remató con el pase afarolado ligado al de pecho. La mejor fue una serie con la diestra, que fue culminada con un cambio de mano por delante y un sabroso de pecho. Concluyó su labor con una dosantina y manoletinas con ajuste. Se tiró a matar con mucha convicción; pero se encontró con hueso. Después una entera fulminante que generó la petición del público.

José María Pastor realizó un trasteo de buen calado. De hecho, al momento de escribir ésta crónica, la Empresa nos confirmó que el torero de Aguascalientes entraba a la novillada de triunfadores de la temporada.

Abrió plaza con un ejemplar de La Playa, que, como sus hermanos con los alternantes, le pidió el carné a José María. A “Boticario”, un novillo que no tuvo fijeza de salida, Pastor lo retuvo con lances templados, a pesar que la cabeza del ejemplar era un abanico. Luego de la suerte de varas, Iván Hernández tomó su derecho al quite, por tafalleras voluntariosas.

Y Pastor –claro– replicó con un muy aplaudido quite combinado de tafallera, caleserina, y un torero remate afarolado de hinojos, que arrancó la ovación del respetable. Cubrió con voluntad el tercio de banderillas, con dos pares al cuarteo por los adentros y un tercero lleno de clasicismo. Otra ovación. Con la pañosa de nuevo echó rodillas a tierra, para torear por alto con temple y seguir de pie en la misma línea.

Suelto de cabeza, José María aguantó a pie firme  las tarascadas, así como la condición que el novillo volvía en dos manos. Aún se recreó en series por derecha y una muy lograda por naturales con la izquierda. Cerró su actuación por manoletinas y el de la firma, que ligó con uno de pecho y estatuarios. Se tiró a matar, para dejar un espadazo defectuoso, que no impidió que los tendidos le llamaran a recibir la ovación al tercio.

De Francisco Martínez, tercero en el orden de lidia, mucha entrega fue la base fundamental de su faena de hoy. El pupilo de La Playa, tampoco era fácil. Realizó un quite por “escobarinas” rematado con una revolera que la parroquia le celebró mucho. Cubrió el tercio de banderillas con más emotividad que clasicismo: un cuarteo desde largo, un par al violín, y un cuarteo, éste sí, como mandan los cánones. Para el tercio de muerte, “Tabaquito” volvía en los manos. Pero Martínez no se arredró, a pesar que el novillo no se entregaba. Con mucho aguante y seguridad –no iba el toro a perdonar errores– le cuajó muy buenas tandas con la mano izquierda, en una faena larga que gustó a los tendidos tapatíos. Abrochó la faena con estatuarios en tablas en la suerte contraria, para volcarse en el morrillo, dejar un pinchazo y una entera fulminante. Fue llamado a recibir una ovación en el tercio.

Ricardo de Santiago tuvo el triunfo en sus manos. Para abrirse de capa, se fue al centro del ruedo a recibir al toro más hecho del encierro. Dos largas afaroladas y un para de chicuelinas fueron su carta de presentación de hoy. Para el segundo tercio, Ricardo pidió los palos y lo hizo con dos cuarteos, un galleo ligado a un cuarteo por el pitón derecho para cosechar una salva de aplausos.

Honor a quien honor merece, el potosino consiguió los mejores muletazos de la tarde. Incluso, con cabeza torera, se puso cerca, le atrasó la muleta, lo aguantó, y templó a su enemigo, entre los oles tapatíos. Incluso sepultó un estoconazo; pero el de La Playa no dobló y del callejón le llevaron la espada corta (Ganas me dieron de decirles que no. Que los novilleros, no sé por qué, son malitos con el descabello). Se eternizó con la de cruceta, y el ánimo se enfrió. Ni modo. Estaba adentro y se salió.

Iván Hernández tuvo una muy valiente y digna actuación. Su labor prometía, puesto que con la cabeza bien puesta bregó (cuántos no saben hacerlo) con rigor al segundo de la tarde. También es cierto que le faltó castigo al novillo, y llegó a la muleta con mucho poder, y mucha exigencia a la muleta. Quizá le faltó esperar más a su enemigo. Quizá le faltó acortar la distancia y atrasarle la muleta. Par de pinchos, tres cuartos delantera y un golpe con la de cruceta. Aviso y silencio.

A Rafael Soriano le correspondió un novillo mal presentado y, aunque la parroquia no se lo recriminó, sí que le midió con otra vara. Rafael estuvo entregado toda la tarde. Toreó de capa por afarolados de hinojos. En el quite lo hizo por navarras y cubrió el tercio de banderillas, con tendencia, más a la espectacularidad que a la sustancia: como el par “monumental” pero cerrado en tablas. Brindó su actuación al buen fotógrafo zacatecano Felipe Pescador.

Comienza su labor el torero, con un péndulo y varios estatuarios de buena factura. Desgraciadamente, su enemigo se apagó irremediablemente. Se la juega Soriano en manoletinas muy ceñidas, ante el toro que iba paso a pasito. Tres pinchazos y una entera rinconera. Dejó un grato sabor de boca en la afición.

Para el próximo domingo 3 de diciembre, la empresa anuncia un festejo en el que estará en disputa el trofeo “Manuel Capetillo”, obra del escultor de Guadalajara, Santiago Flores. también el “Estoque de Plata” donado por la Peña Taurina Guadalajara A.C. de ésta ciudad. Hasta éste momento están en el cartel, el rejoneador Santiago Zendejas, los Forcados Mexicanos. Y a pie, mano a mano, Arturo De Alba y a quien se elija de entre José María Pastor y Francisco Martínez.


Ficha

Guadalajara, Jal.- Plaza "Nuevo Progreso". Un quinto de plaza, en tarde fresca. Festejo "Semifinal" de la temporada de novilladas en Guadalajara. Novillos de La Playa, cuatro bien presentados y dos (4o y 5o.) de pobre presencia y diferentes en tipo, complicados en general, aunque ausentes de malas ideas.  Pesos: 450, 420, 440, 430, 440 y 450 kilos. José María Pastor (corinto y oro): Ovación. Iván Hernández (lila y oro): Silencio tras aviso. Francisco Martínez (tabaco y oro): Ovación. Arturo De Alba (purísima y oro): Oreja. Rafael Soriano (rosa y oro): Silencio. Ricardo de Santiago (azul pavo y oro): Silencio con aviso. Incidencias: De ésta forma hay un triunfador, Arturo De Alba, por el corte de una oreja; pero está por definirse quién será el alternante, que deberá salir de entre los toreros llamados al tercio, José María Pastor y Francisco Martínez.  Al inicio de la lidia, tanto del 5o. como del 6o., la iluminación artificial del coso perdió aproximadamente el 40 por ciento. En cada una de las ocasiones, el equipo de la "Nuevo Progreso" consiguió resolver los problemas. Eso sí, hubo que tener paciencia. También falló la indicación del tiempo de inicio de las faenas de muleta que el palco debe tener a la vista.


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