El recortador goyesco Emmanuel Ayala fue operado satisfactoriamente y poco a poco se recupera con éxito de la grave cornada sufrida el día de ayer en la plaza de Juchipila, donde un toro de Puerta Grande le propinó una herida de tres trayectorias en el muslo derecho.

Dos de éstas fueron de diez centímetros y la tercera fue de treinta, misma que llegó hasta la cabeza del fémur y pasó cerca de la femoral, de acuerdo a lo que explicó su padre, el conocido taurino y chef Manolo Ayala. La cirugía fue realizada por el cuerpo médico de las plazas de Aguascalientes.

"Fue un tabaco muy grande y estamos bendecidos por Dios. Los médicos argumentan que fue una cornada similar a la de Paquirri. La atención médica fue de categoría y el primer contacto fue con el doctor González Carega, que lo tocó y le metió mucha gasas para controlarlo, y en una clínica de Juchipila se le administraron los medicamentos pertinentes preoperatorios para poder trasladarlo. Lo operó el equipo médico que en su momento atendió a José Tomás, así que mi hijo está en las mejores manos"

Emmanuel Ayala, de 18 años de edad, se encuentra en buen estado de ánimo y ya está reposando en una habitación de piso, no en Terapia Intensiva, debido a que va evolucionando hasta el momento de manera positiva. Esta tarde será valorado nuevamente por el equipo médico y se darán las instrucciones necesarias.

"Como padre ha sido difícil, pero tuve que mantenerme siempre fuerte para apoyar a mi hijo. Ese toro era la tercera vez que se jugaba, y esto era porque le gustaba mucho al grupo ya que era muy bravo. De lo poco que sé del toro, creo que al burlarlo constantemente con recortes y saltos, el toro andaba muy frustrado, y cuando alcanzó a mi hijo pues se ensañó con él y quería destrozarlo", explicó.