El matador de toros español Eduardo Gallo se resintió de una añeja lesión provocada por una cornada, lo cual le impidió desarrollar y por ende concluir la lidia de sus dos ejemplares la tarde de ayer, durante la segunda corrida de la Feria de Teziutlan.

Es por ello que tras ser valorado por un grupo de especialistas encabezados por el doctor Alberto Pérez Becerra: se emitió el parte médico que entre otras cosas señaló lo siguiente: 

"Ingresa a este nosocomio con sospecha de ruptura de músculo abductor de pierna derecha, sin embargo, a la exploración física y de acuerdo a los resultados de imagen realizados en esta institución médica, se descarta dicha lesión, identificando hernia inguinal ipsilateral no complicada.

Se sugiere a la brevedad poder programar procedimiento quirúrgico. Por el momento se recomienda evitar esfuerzos físicos quedando imposibilitado momentáneamente para realizar actividades taurinas. Pronóstico bueno para la vida y la función, no exento de complicaciones".