Banners
Banners
altoromexico.com
Banners

Efemérides: Silveti, siete años como matador

Martes, 14 Ago 2018    CDMX    Jorge Raúl Nacif | Foto: Archivo   
Recibió el doctorado el 12 de agosto de 2011

El 12 de agosto de 2011 se convirtió Diego Silveti en matador de toros, en lo que fue un acontecimiento que tuvo lugar en la plaza "El Bibio", de la ciudad de Gijón, en España, en el marco de un cartel muy especial y de primerísima línea.

Y es que Silveti llevó como padrino al maestro José Tomás, lo que de suyo tiene ya una connotación singular, mientras que el padrino fue Alejandro Talavante, acartelados todos con una corrida de la ganadería de Salvador Domecq, toros en tipo y de bonitas hechuras.

El acontecimiento fue representativo también porque, originalmente, David Silveti, padre de Diego, iba a ser el encargado de darle la alternativa al propio Tomás aquel 10 de diciembre de 1995 en la Plaza México. Sin embargo, debido a la última lesión de rodilla del maestro salmantino, esto ya no pudo realizarse y fue Jorge Gutiérrez el encargado de la ceremonia.

Diego Silveti se doctoró delante de un toro de nombre "Lisonjero", número 54 y con 465 kilos, negro burraco en cuanto a su pinta, un ejemplar que la administración del toricantano tuvo la oportunidad de escoger gracias a la cortesía del primer espada, en lo que era una añeja tradición retomada en esta oportunidad.

Ante "Lisonjero", y después de la cesión de trastos, el recién alternativado firmó momentos de buen toreo. Sin embargo, lo mejor vino con el sexto de la función taurina, pues Diego se mostró sereno y ejecutó un limpio quite por saltilleras, para luego plantarse en una faena que tuvo sentimiento y pasajes que calaron en los tendidos.

Y si la espada le jugó una mala pasada y le privó de pasear por lo menos una oreja, el cariño del público no se hizo esperar y le ovacionó con fuerza en una vuelta al ruedo que redondeó una de las tardes importantes en la trayectoria del ahora todavía joven matador mexicano.

El maestro José Tomás no defraudó a su público y se alzó con el corte de una oreja durante aquella corrida en Gijón, mientras que el que salió en volandas fue Alejandro Talavante, que en esos tiempos comenzaba a consolidarse como una de las jóvenes figuras en España.

De esta forma, Diego Silveti daba el paso al escalafón mayor tras dos años de desempeñarse como novillero, etapa que estructuró completamente en Europa y donde desarrolló el oficio, pisando además las plazas más importantes, como Las Ventas de Madrid y La Maestranza de Sevilla.


Comparte la noticia


Banners
Banners